CHAU LOCO LINDO
Se nos fue Raúl Emilio Bernao (falleció ayer 26), que además de haber sido un personaje (como todos los wines de esa época), fue un extraordinario jugador de fútbol, de esos que la tenían atada al pie a la pelota, sus apodos más famosos fueron “el loco” o también “el poeta de la derecha”, y tuvo una exitosa campaña en la década del ’60 en Independiente de Avellaneda, donde fue varias veces campeón argentino y 2 veces campeón de la Libertadores, justo las 2 primeras, las del 64’ y 65’ (la delantera formaba con Bernao, Mura, Luis Suárez, Mario Rodríguez y Savoy), y también fue figura en la selección argentina, y yo como “xeneize” lo recuerdo por lo memorables duelos que tenía con Silvio Marzolini, una de nuestras estrellas más fulgurantes, cuando nos enfrentábamos con “el rojo” ya en la semana previa se hablaba también del duelo Marzolini-Bernao, y eran unos mano a mano de “rompe y raja”, porque los 2 eran extraordinarios y en definitiva, el que prevalecía en ese “mini match” inclinaba el partido, yo en particular recuerdo 2, uno en La Bombonera, creo que en el ’66, donde Marzolini “lo bailó”, incluso hasta le hizo un sombrero pasando la pelota del muslo derecho al izquierdo, la cancha se venía abajo, ganó BOCA 3-1, obviamente la figura fue don Silvio, y la contracara fue en Avellaneda, en 1967 si la memoria no me falla, “el rojo” venía puntero y finalmente saldría campeón, pero BOCA llegaba también con posibilidades y además teníamos un equipazo, la cancha estaba “a reventar”, y aquí Bernao se hizo “un pic nic” con Marzolini, lo desbordó toda la tarde y el match terminó 3-2 para los de Avellaneda, los últimos 2 goles los hizo Luis Artime contra la tribuna visitante, ambos producto de 2 desbordes del “loco” Bernao y centros perfectos atrás, que eran su especialidad.
Fue un indiscutible en su puesto, había partidos en que los hinchas “lo querían matar”, porque era “lagunero” y se iba del match, pero la historia nos marca que los grandes jugadores, esos que fueron tocados por la varita mágica, siempre fueron discontinuos, y Raúl Emilio Bernao no fue la excepción, pero a los que nos gusta el fútbol nos hizo disfrutar durante una década, por eso le decimos: CHAU LOCO LINDO !!!.
Un saludo cordial,
HORACE de la BOCA
Se nos fue Raúl Emilio Bernao (falleció ayer 26), que además de haber sido un personaje (como todos los wines de esa época), fue un extraordinario jugador de fútbol, de esos que la tenían atada al pie a la pelota, sus apodos más famosos fueron “el loco” o también “el poeta de la derecha”, y tuvo una exitosa campaña en la década del ’60 en Independiente de Avellaneda, donde fue varias veces campeón argentino y 2 veces campeón de la Libertadores, justo las 2 primeras, las del 64’ y 65’ (la delantera formaba con Bernao, Mura, Luis Suárez, Mario Rodríguez y Savoy), y también fue figura en la selección argentina, y yo como “xeneize” lo recuerdo por lo memorables duelos que tenía con Silvio Marzolini, una de nuestras estrellas más fulgurantes, cuando nos enfrentábamos con “el rojo” ya en la semana previa se hablaba también del duelo Marzolini-Bernao, y eran unos mano a mano de “rompe y raja”, porque los 2 eran extraordinarios y en definitiva, el que prevalecía en ese “mini match” inclinaba el partido, yo en particular recuerdo 2, uno en La Bombonera, creo que en el ’66, donde Marzolini “lo bailó”, incluso hasta le hizo un sombrero pasando la pelota del muslo derecho al izquierdo, la cancha se venía abajo, ganó BOCA 3-1, obviamente la figura fue don Silvio, y la contracara fue en Avellaneda, en 1967 si la memoria no me falla, “el rojo” venía puntero y finalmente saldría campeón, pero BOCA llegaba también con posibilidades y además teníamos un equipazo, la cancha estaba “a reventar”, y aquí Bernao se hizo “un pic nic” con Marzolini, lo desbordó toda la tarde y el match terminó 3-2 para los de Avellaneda, los últimos 2 goles los hizo Luis Artime contra la tribuna visitante, ambos producto de 2 desbordes del “loco” Bernao y centros perfectos atrás, que eran su especialidad.
Fue un indiscutible en su puesto, había partidos en que los hinchas “lo querían matar”, porque era “lagunero” y se iba del match, pero la historia nos marca que los grandes jugadores, esos que fueron tocados por la varita mágica, siempre fueron discontinuos, y Raúl Emilio Bernao no fue la excepción, pero a los que nos gusta el fútbol nos hizo disfrutar durante una década, por eso le decimos: CHAU LOCO LINDO !!!.
Un saludo cordial,
HORACE de la BOCA
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