CHICOS MALCRIADOS
Así son los futbolistas argentinos (y los otros también), exigen contratos millonarios pero a la hora de cumplirlos lo hacen “sí se les da la gana” y la mayoría de las veces aportan muy poco y a cuenta gotas, y su vida privada dista mucho de ser ordenada, ya que salen más veces en las revistas del “showbizz” local que en las de deportes, y de tanto deambular en el ambiente de “las vedettes y gatos” vernáculos adoptan sus posturas, son egoístas, bocones, mentirosos, llorones y se mueven únicamente por una moneda, pero sí todo esto sucede es por culpa exclusiva de los dirigentes, que no tienen las pelotas suficientes para “pararles el carro” y ponerlos en su lugar, porque la categoría de estos dirigentes (salvo algunas escasas excepciones) deja mucho que desear, entonces los futbolistas saben que sí el club gastó un montón de dinero y se endeudaron por ellos, no los van a “rajar” tan fácil y por eso mismo se creen los dueños del club.
Esto no solo es cierto sino que es un problema grave, pero tampoco es nuevo, este “endiosamiento” de los jugadores es de todas las épocas, y en BOCA los tuvimos ( y los tenemos hoy) y a montones, como por ejemplo don Alberto J. Armando tuvo que “rajar” a unos cuantos que le querían manejar el equipo, como a Sanfilippo, a Rattín, a Marzolini, a Suñé, etc. etc., y para dar otro ejemplo más reciente, que sí bien no es argentino viene muy bien, es el caso de Riquelme en el Villareal, Román se creyó (en realidad se cree) “el mandamás” y el presidente del club “galaico” respaldó al D.T. Pellegrini (como correspondía, aunque hayan perdido mucho dinero) y por eso hoy Román está en BOCA, donde yo estoy seguro de que en algún momento volverá a pasar algo similar, por ahora va todo bien porque tanto Russo el año pasado como hoy Ischia lo dejan hacer lo que quiere, mientras se gane no va a pasar nada, pero acuérdense lo que les digo: ya va a llegar el momento en el que Riquelme se enfrente con el técnico o con los dirigentes (además ya lo hizo hace muchos años cuando le hizo ‘el topo gigio’ a Macri, se acuerdan ???); otro caso similar al de Riquelme es el de “la brujita” Verón en Estudiantes de La Plata, ya que también hace lo que quiere, y como además puso una montaña de plata en el club, quién lo va a parar ???, el presidente ??? NOOOOO !!! el técnico ???, MENOS QUE MENOS !!!.
Lo de San Lorenzo hoy es un caso que reactualiza este tema, un ejemplo típico es el de Orión, que tenía un contrato firmado y como le llegó una oferta a principios de año se quiso ir volando sin importarle que tenía un contrato vigente y los compromisos que tenía con el equipo, entonces el técnico Ramón Díaz se opuso (hizo muy bien), la dirigencia lo avaló y el arquero se tuvo que quedar, pero ohhhh casualidad, el arquero fue uno de los principales responsables de la eliminación del “cuervo” contra la Liga (porque “se comió” los 2 goles ecuatorianos) y del enfrentamiento del plantel con el D.T., que terminó con el escandaloso alejamiento del riojano del club en medio de acusaciones cruzadas de baja estofa.
Otro caso testigo es el del “burrito” Ortega, un tipo díscolo y desordenado (además de que futbolísticamente está acabado) que lo único que hace es generar mal ambiente en el plantel “gallina”, pero como es “el niño mimado” de River, “el cholo” Simeone lo tiene que poner porque sino “arde Troya”, y aquí vemos como además de los dirigentes nosotros los hinchas también actuamos en forma equivocada, porque la mayoría de los hinchas parecieran ser hinchas de los jugadores (caso Palermo y Guillermo Schelotto en BOCA) más que del club.
En suma, cuando hablamos de que en este “bendito” país falla la dirigencia, también en el fútbol sucede lo mismo (no podía ser una isla), los dirigentes son de 4º categoría (el líder es ‘el buche’ Aguilar) y como no son “trigo limpio” se tienen “que comer” los desplantes de sus dirigidos que conocen sus chanchullos (caso Ahumada de River que amenazó con contar manejos turbios sí lo multaban); por eso es que estas situaciones se seguirán repitiendo, porque los dirigentes “se montan” en los clubes para hacerse conocidos y hacer negocios con las transferencias (caso Macri) sin importarles sí el club queda en la bancarrota y sí el vestuario es "un cabaret", entonces es impensable de que le pongan freno a las actitudes "vedettistas" de sus “players”, porque en muchos casos ellos mismos las fomentan.
Un saludo cordial,
HORACE de la BOCA
Así son los futbolistas argentinos (y los otros también), exigen contratos millonarios pero a la hora de cumplirlos lo hacen “sí se les da la gana” y la mayoría de las veces aportan muy poco y a cuenta gotas, y su vida privada dista mucho de ser ordenada, ya que salen más veces en las revistas del “showbizz” local que en las de deportes, y de tanto deambular en el ambiente de “las vedettes y gatos” vernáculos adoptan sus posturas, son egoístas, bocones, mentirosos, llorones y se mueven únicamente por una moneda, pero sí todo esto sucede es por culpa exclusiva de los dirigentes, que no tienen las pelotas suficientes para “pararles el carro” y ponerlos en su lugar, porque la categoría de estos dirigentes (salvo algunas escasas excepciones) deja mucho que desear, entonces los futbolistas saben que sí el club gastó un montón de dinero y se endeudaron por ellos, no los van a “rajar” tan fácil y por eso mismo se creen los dueños del club.
Esto no solo es cierto sino que es un problema grave, pero tampoco es nuevo, este “endiosamiento” de los jugadores es de todas las épocas, y en BOCA los tuvimos ( y los tenemos hoy) y a montones, como por ejemplo don Alberto J. Armando tuvo que “rajar” a unos cuantos que le querían manejar el equipo, como a Sanfilippo, a Rattín, a Marzolini, a Suñé, etc. etc., y para dar otro ejemplo más reciente, que sí bien no es argentino viene muy bien, es el caso de Riquelme en el Villareal, Román se creyó (en realidad se cree) “el mandamás” y el presidente del club “galaico” respaldó al D.T. Pellegrini (como correspondía, aunque hayan perdido mucho dinero) y por eso hoy Román está en BOCA, donde yo estoy seguro de que en algún momento volverá a pasar algo similar, por ahora va todo bien porque tanto Russo el año pasado como hoy Ischia lo dejan hacer lo que quiere, mientras se gane no va a pasar nada, pero acuérdense lo que les digo: ya va a llegar el momento en el que Riquelme se enfrente con el técnico o con los dirigentes (además ya lo hizo hace muchos años cuando le hizo ‘el topo gigio’ a Macri, se acuerdan ???); otro caso similar al de Riquelme es el de “la brujita” Verón en Estudiantes de La Plata, ya que también hace lo que quiere, y como además puso una montaña de plata en el club, quién lo va a parar ???, el presidente ??? NOOOOO !!! el técnico ???, MENOS QUE MENOS !!!.
Lo de San Lorenzo hoy es un caso que reactualiza este tema, un ejemplo típico es el de Orión, que tenía un contrato firmado y como le llegó una oferta a principios de año se quiso ir volando sin importarle que tenía un contrato vigente y los compromisos que tenía con el equipo, entonces el técnico Ramón Díaz se opuso (hizo muy bien), la dirigencia lo avaló y el arquero se tuvo que quedar, pero ohhhh casualidad, el arquero fue uno de los principales responsables de la eliminación del “cuervo” contra la Liga (porque “se comió” los 2 goles ecuatorianos) y del enfrentamiento del plantel con el D.T., que terminó con el escandaloso alejamiento del riojano del club en medio de acusaciones cruzadas de baja estofa.
Otro caso testigo es el del “burrito” Ortega, un tipo díscolo y desordenado (además de que futbolísticamente está acabado) que lo único que hace es generar mal ambiente en el plantel “gallina”, pero como es “el niño mimado” de River, “el cholo” Simeone lo tiene que poner porque sino “arde Troya”, y aquí vemos como además de los dirigentes nosotros los hinchas también actuamos en forma equivocada, porque la mayoría de los hinchas parecieran ser hinchas de los jugadores (caso Palermo y Guillermo Schelotto en BOCA) más que del club.
En suma, cuando hablamos de que en este “bendito” país falla la dirigencia, también en el fútbol sucede lo mismo (no podía ser una isla), los dirigentes son de 4º categoría (el líder es ‘el buche’ Aguilar) y como no son “trigo limpio” se tienen “que comer” los desplantes de sus dirigidos que conocen sus chanchullos (caso Ahumada de River que amenazó con contar manejos turbios sí lo multaban); por eso es que estas situaciones se seguirán repitiendo, porque los dirigentes “se montan” en los clubes para hacerse conocidos y hacer negocios con las transferencias (caso Macri) sin importarles sí el club queda en la bancarrota y sí el vestuario es "un cabaret", entonces es impensable de que le pongan freno a las actitudes "vedettistas" de sus “players”, porque en muchos casos ellos mismos las fomentan.
Un saludo cordial,
HORACE de la BOCA
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