jueves, diciembre 20, 2007


ESCUCHEMOS OTRA ‘CAMPANA’

Vale la pena escuchar las palabras de uno que sabe de fútbol, de uno que estuvo adentro y que ganó y perdió (fue campeón del mundo con Racing en 1967, campeón local con River en 1975, pero perdió la clasificación al mundial de 1970 con Argentina), de uno que sabe de lo que habla, de uno que “la vivió”, ya que estamos tan cansados de escuchar a tantos “giles” que hablan y que su única experiencia con el fútbol fue una “play station”, por eso veamos que dice Roberto Perfumo, “el mariscal”, como le decían en su época de gloria, que es una pena que haya terminado en River después de haber sido campeón intercontinental con Racing, porque hubiera sido un “back” ideal para la defensa “xeneize”, de esos “duros y mal entretenidos”, como nos gustaban a nosotros (y aún nos siguen gustando), pero pasen y lean que es lo que dijo respecto de BOCA y Russo:

A continuación se extractan los párrafos más destacados de su espacio semanal en OLÉ titulado “El Mariscal juega y marca”, y que antes de ayer Martes llevaba por título “Sacrificar al técnico blanquea a los demás”, aquí va:

“En partidos decisivos, además de lo que haya propuesto el entrenador, un equipo, por decisión propia, necesita una respuesta más. Es una carencia general y ahora le pasó a Boca.”

“Los torneos los pueden ganar o perder los técnicos. Las finales las ganan los jugadores. Pero hay como una compulsión: sacrificar a Russo para que jugadores y dirigentes no sean los "culpables". Como en los rituales tribales, alguien debe morir para que el resto siga vivo. Un hábito "salvaje" arraigado en todos los niveles de la sociedad y que no tolera razonamientos.”

“¿Este Boca podía ganarle al Milan? Hubiese sido un milagro... Ni cinco Bianchis nivelarían las actuales diferencias entre los dos equipos. Pero Russo se tiene que ir, pese a que él no ordenó los horrores defensivos. Nada menos que en una final, y le salió barato, se comió cuatro goles. El equipo no tuvo actitud de campeón; y eso no depende del técnico, es virtud del grupo. Los que estuvimos dentro de un vestuario lo sabemos. Cuando queda solo, el que entra a jugar conoce esa sensación: o nos cagamos, o somos "camboyanos" y no nos gana nadie. Y esto último Boca no lo mostró en ningún momento. Sus jugadores, y no el entrenador, no supieron cómo se juega una final.”

“Este Boca de Russo, aunque cueste aceptarlo, está en formación. Por lo tanto, le falta mística, identidad. ¿Qué significan estas virtudes, que unidas hacen invencible a un grupo? Se trata, nada más y nada menos, de la capacidad para superar la influencia del técnico. Un equipo que, además de lo que proponga el entrenador, tenga una respuesta más. Y este Boca no la tiene, como no la tuvo con La Volpe. No gana partidos por sí solo. Hoy, los jugadores (de cualquier equipo) son los dueños del escolaso. Porque se van cuando quieren; echan técnicos; son amigos de los periodistas; son las "estrellitas...". Pero no saben ganar finales para justificar tanto protagonismo. Verlos tan mediáticos suele defraudar al hincha.”

Dijo muchas cosas, varias las comparto, sobre todo lo de “estrellitas mediáticas” por los “players”, pero en algunas disiento, como cuando dice que “este BOCA no tuvo respuestas con La Volpe”, pero yo le recuerdo al “mariscal” que ese mismo BOCA sí las había tenido con Basile, era casi el mismo equipo, de todas maneras creo que es valioso su punto de vista, aunque yo lo quiero a Russo “out” ahora mismo (“right now” dirían los yanquis), aunque no viene mal escuchar “la otra campana”, pero de alguien que sabe como en este caso.

Un saludo cordial,

HORACE de la BOCA

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